CURSO: Sujeto, memoria y conflicto
DOCENTE: Mario Elkin Ramírez
ESTUDIANTE: María Cristina Tamayo
Protocolo del 13 de Septiembre 2016
Una compañera expone el texto: “Tiempos de horror” del autor Wolfgan Sofsky el cual explica las implicaciones sobre el Amok.
Luego el profesor Mario Elkin Ramírez toma la palabra, dice que la oposición vida o muerte tiene una larga tradición en occidente, Freud habló sobre una teoría pulsional que concierne a la subjetividad, instancias como el preconsciente, consciente, inconsciente, yo, superyó, ello; También doto en ese aparato psíquico, una economía psíquica, referida a las pasiones, a los afectos, a las pulsiones, él hablaba de la pulsión sexual opuesta a la pulsión de auto conservación o el yo, Pero luego Freud opone la pulsión de vida y muerte.
Debido a su formación clásica, él aprendió griego, latín, pudo estudiar dos años ciencias sociales y humanas y filosofía para después dedicarse a la medicina, estas bases le sirvieron cuando en su consultorio escuchaba a sus pacientes histéricos hablando sobre el amor, la locura, la sexualidad, la muerte, eso que Michel Foucault llamó “experiencias límites del ser”, su formación humanística le sirvió para sistematizar estas experiencias; la pulsión sexual, está al servicio de la vida, por ello la especie continua, la auto conservación, está al servicio de la vida: comer, alimentarse, cuidarse.
En 1920 después de la Primera Guerra Mundial, Freud, descubre que el humano tiene una tendencia hacia la muerte, la llama pulsión de muerte dice que es muy poderosa, que la vida es un rodeo hacia la muerte, finalmente, a nivel individual del uno por uno perdemos la batalla y morimos, aunque la vida le va ganando a la muerte como especie, aunque esta no está asegurada pues la especie humana ha sido la más exitosa a nivel de supervivencia, pero aun así se destruye con las armas atómicas, químicas, que inventa y con la destrucción del planeta.
Freud pensaba que la vida le iba ganando a la muerte, usa términos griegos la pulsión de vida: Eros y Thanatos: la pulsión de muerte. Thanatos hermano gemelo de hipnos que es el dios del sueño. Dormir es un poco como morir. Freud está describiendo tendencias psíquicas, subjetivas, en nosotros la pulsión de muerte nos dice que se manifiesta en el exceso de alcohol, drogas, tabaco, de sexo sin protección, aunque esto no nos detiene en la toma de riesgos, esa tendencia nos impulsa a morir así sea lentamente.
En un texto tardío de Freud descubre a Empédocles, filósofo presocrático, pensaba que el mundo, (el cosmos que significa orden, opuesto al caos, de ahí viene cosmogonía, cosmología, cosmética, poner orden donde está el caos); Empédocles pensaba que el mundo se ordenaba en cuatro elementos, fuego, tierra, aire, agua, la sabiduría antigua del mundo se constituye a partir de estos, que se ordenan a través de las fuerzas de la vida y de la muerte, a la muerte la llama discordia y a la vida Eros. Freud, se maravilla de lo que descubre este filósofo 2 mil años antes que él, Freud lo redescubre a través de una vía clínica, científica. Quiere decir que este pensamiento es de larga tradición, hunde sus raíces en los orígenes del pensamiento occidental.
Aquí lo vemos de nuevo en el autor Sofsky, actuando como la conciencia de nuestra propia finitud, el hombre ante la muerte y ante la vida, ese es el fondo, comienza a desarrollar ya en el contexto de la historia para explicar lo que es el Amok, su término fundamental, la oposición entre el héroe y el mártir en la guerra. El héroe, el ideal guerrero por ejemplo Aquiles, en la Ilíada, se relata como encarnación de todas las virtudes de ser griego: la valentía, la belleza, el arrojo, el entrenamiento físico; en ese entonces siglo V, antes de Cristo, se educaba o para la guerra o para el saber, Pericles hizo escribir el griego a través de los mejores intelectuales de esa época, para los griegos había una ética para la guerra y otra para el saber, por eso inventaron la democracia. Decían hombres que era mejor vivir una vida corta llena de gloria y honor, que no una vida larga llena de aburrimiento, de conocimiento y de filosofía. De allí a Napoleón, a Alejandro Magno, hoy en día los guerrilleros se hacen llamar también héroes, encarnando una valoración social, una axiología un sistema de valores, de la propiedad, del pueblo en fin y a nombre de eso se van a matar a los otros son buenas razones para ir a la guerra, armamos discursos razonables por eso la razón crea monstruos pues es en nombre del sistema de valores sociales que se va a la guerra.
La otra opción son los mártires, el más grande: Jesucristo el mártir del calvario, héroes cristianos: los cruzados en nombre de Dios iban a matar a los árabes, los cristianos tienen la figura de Cristo que no es un guerrero sino un mártir, aquí la reflexión del autor es muy interesante porque el héroe será dignificado por morir en la gloria, pero en el mártir la violencia es contra sí mismo. Su propia muerte es lo que desea, lleno de azotes, ensangrentado, caído, triste, derrotado, masacrado, no se defendió, no utilizo la violencia para defenderse ni dejó que lo defendieran, morir por los otros sometiéndose a la voluntad de Pilatos, de ahí nace toda una revolución religiosa.
Pocos quieren ser mártires, aunque todos quieren ser recordados, pasar a la historia, vivir en la historia colectiva sobre todo como héroes, buscan un estatus, como en nuestra República, Bolívar trasciende la muerte, a través de la memoria, la encarnación del héroe en nuestra nación, consagrada al sagrado corazón de Jesús, pero también bolivariana; Cuando Jesús resucita queda como héroe, aunque se le pide o reza no al resucitado sino al caído, pero él era un Dios, puede ser un mito, contrastado con el héroe griego, pero Alejandro existió.
A veces el mártir o el héroe se juntan cuando subyacen en una especie de apología de la guerra y de la violencia. Da estatus la guerra, matar, cuando los jóvenes reinsertados se van por prestigio social, en los testimonios se escucha: «yo los veía tan bonitos con uniformes y armas, querían ser como ellos», las niñas se enamoran, quieren tener un hijo del líder, por ejemplo un matón en la Sierra, al que llamaban muñeca que tuvo más de 20 hijos en diferentes muchachas y su padre recogía a los niños para ayudarlos ya que se había hecho testigo de Jehová, y pedía dinero para ellos.
En psicoanálisis la explicación de esa investidura se hace sexual, el arma tiene una investidura fálica, pero no siempre en relación a los genitales sino que las cosas generen un placer, formas de satisfacción, con relación a la muerte, Freud escribió “más allá del principio del placer” porque se dio cuenta que el aparato psíquico no solo se rige en relación al placer: huimos del displacer, buscamos de manera hedonista el placer, queremos serenidad, que no hayan muchos altibajos, queremos mantener una homeostasis de placer, pero la pulsión de muerte es más allá del placer, Lacan lo llamará un goce, implica exponerse, ejemplo, empezar con las cosquillas pero si te amarran y te siguen haciendo cosquillas, ya es demasiado se vuelve un displacer, puede dar un espasmo, un infarto se hace una tortura… el goce más allá es inconsciente, por ejemplo tomarse unos tragos con amigos pero el alcohólico está más allá… y así diferentes drogas que llevan a extremos, en la guerra también hay mucho de eso, como el que se lanza sin importarle su propia vida.
Lo coyuntural en nuestro país es que se logró el reconocimiento y resarcir derechos de las víctimas, pero ahora se debe tener cuidado pues todo es susceptible de generar víctimas, del maltrato, de la violencia sexual, en fin, el autor pone es cuestión esto, dice que el perpetrador fue en algún momento una víctima, de victima pasó a verdugo, son historias descubiertas de niños que fueron maltratados.
Las niñas a veces se van a las armas por enamorarse de un chico, y los niños por amor a las armas o porque no fueron niños deseados, según Lacan: “todo niño no deseado tiende al suicidio” en fin, hay muchas formas de violencia aunque aquí en Colombia se recrudece el panorama, ya que no hay reglas y si las hay no son respetadas, no hay culpas, ni remordimientos.
Hay gente que se queda en la posición de víctima perdiendo su identidad con el fin de ser resarcidos, la pensión, la ayuda humanitaria, la sutileza es que cuando el perpetrador es tratado como víctima al explicar por qué llegó allí, dicen que al pobre, sus padres lo golpeaban, lo dejaban aguantando hambre, pero esto sería una explicación, no puede volverse una justificación ya que hay muchos que fueron abusados y no se decidieron por la violencia. Eso de psicologizar todo no es bueno ya que nos toca responsabilizarnos de las consecuencias de nuestros actos, lo que hacemos y lo que nos dejamos hacer.
Un punto importante es cuando la violencia colectiva es un ritual, Freud explica en “tótem y tabú “cómo nace esta cultura: un mito en el cual el protopadre mataba a sus hijos machos o los echaba para quedarse con el monopolio de las hembras, un día los echados llegaron a matarlo y se lo comieron, pero se dieron cuenta que ninguno podía tomar su lugar pues correría la misma suerte, así que hicieron un pacto social: que nadie ocupe ese lugar así que uno no puede tener a todas las mujeres, fueron repartidas, así nacen las estructuras elementales del parentesco y nace la prohibición de matar, sobre todo al padre, nace la culpa, ahí hay una ritualización de la violencia que luego se conmemora en las fiestas donde se sacrifica a un animal y luego se lo comen, en la misa también se hace una cena totémica se come el cuerpo de cristo se bebe su sangre, eso es Dios en tu interior, ser como el líder.
Pero cuando no está en el ritual no aunamos las sensaciones a lo colectivo, vienen los linchamientos, la venganza, el crimen por excelencia hoy es la paidofilia lo insoportable, violencia contra los niños, la gente tiende a tomarse la justicia por la propias manos, la justicia es una venganza sublimada.
La gente se refiere en contra de los violadores de niños que deberían de ser picados, masacrados, castigados de la peor forma. La muerte y la venganza se hace un espectáculo, aquí se llega al Amok el autor no lo define en seguida sino que hace una narración para sustentarlo. Un asesino que al momento de matar estaba poseído por el dolor, o la ira aunque no lo hace imputable esto le da una valoración atenuante.
En psicoanálisis los crímenes psicóticos: la violencia que alguien comete en un fuera de sí. Michel Foucault, tiene un libro donde describe un chico que degolló a su madre y hermanas y luego se mata, él mismo escribe sobre por qué realiza el acto, sus vecinos hablan también, en fin eso hace que podamos pensar en crímenes inmotivados. “una voz me dijo mátalo, una voz me dijo empújala” el profesor explica que no solo es un acto de locura, o sea no solo pasa en los psicóticos sino que puede pasarle a cualquiera a alguien normal, los que matan para hacerle un favor al otro. Estas son algunas consideraciones generales al texto, aquí se da por terminada la clase.
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