Mario Elkin RamirezSigmund Freud

La interpretación de los sueños en el análisis

By 22 enero, 2014mayo 28th, 2021No Comments

Profesor: Mario Elkin Ramírez

Estudiante: Laura Vanessa Montoya Zapata

 

“La ciencia moderna aún no ha producido un medicamento tranquilizador tan eficaz como lo son unas pocas palabras bondadosas”.

Sigmund Freud.

 

Durante la clase del 16 de enero del 2014 de Fundamentos de Psicoanálisis se planteó la Temática de la Interpretación de los Sueños dentro de la labor Psicoanalítica, ya que  la teoría de los mismos representa los primeros elementos teóricos de éste con relación a la naturaleza de la psicología de los sueños inconscientes, la importancia de cada una de las experiencias de la infancia, el lenguaje “hieroglifico” de los sueños y el método que él llama “Psicoanálisis”.

La Clase comenzó con la lectura de la relatoría de la sesión anterior por el alumno Sebastián Palacio y continuó con la exposición de la compañera Alejandra Gómez cuya intervención fue acerca del análisis de un Sueño Paradigmático de Simung Freud, los conceptos fundamentales que se dieron a conocer en la exposición fueron la Interpretación, Simbología, sueño y deseo, ya que Freud manifiesta en su relato que un sueño es el cumplimiento de un deseo, este es también denominado “el sueño de la Inyección de Irma”, el cual es probablemente el sueño más famoso de la Historia del Psicoanálisis, fue el primer sueño que se empleó para desarrollar su teoría de la satisfacción de los deseos.

Freud relata que en el Verano de 1895 tenía una paciente que él llama Irma, cuya nombre real era  Emma Eckstein (1865-1924), una mujer de una prominente familia socialista de Viena, la cual desempeñaba un papel totalmente activista en el movimiento de la liberación de las mujeres, en una lucha constante por los derechos y el reconocimiento de los mismos.

El sueño que tuvo Irma y a partir del cual comenzó a desarrollarse la terapia psicoanalítica,  era el siguiente “Hay una reunión festiva en la residencia de Freud, éste se encuentra con Irma, una ex paciente que presentaba un cuadro de histeria. Irma, se queja de dolor de garganta, estómago y abdomen. En la recepción también está presente un médico, quien examina a Irma y le diagnostica algo como difteria y le explica que esto se debe a que un amigo de Freud le ha colocado una inyección con la jeringa sin esterilizar.”

Freud interpreto que Irma reunía características de multitud de mujeres resistentes a su método psicoanalítico y a las terapias que realizaba de análisis a través de la palabra en su consultorio, reconociendo además el deseo de no sentir culpa de los padecimientos de su ex paciente , ese mismo deseo de no sentirse culpable fue lo que motivo a culpar a su colega en el desarrollo del sueño, ya que el cómo psiquiatra no puede ser responsable de una dolencia orgánica, el día anterior al sueño, Freud se había encontrado con ese amigo médico, en dicho encuentro se generó una diferencia de opinión con él. Éste le contó a Freud, que ahora él estaba atendiendo a Irma y ella se estaba recuperando satisfactoriamente. Freud entendió este comentario, como una crítica hacia su método terapéutico y como para justificar este “reproche” esa misma noche escribió la historia clínica de Irma. En el sueño atribuye la responsabilidad de los problemas de Irma a su colega, pero, realmente Freud considera que el tiene gran parte de la culpabilidad en el desarrollo del tratamiento de la paciente, lo cual logra interpretarse en el sueño.
“ Por lo tanto el contenido del sueño es la realización de un deseo”

Luego de la intervención de la compañera el profesor comienza a profundizar algunos aspectos de este relato de Freud determinando que este mantiene que todos los sueños representan la realización de un deseo  por parte del soñador, incluso aquellos sueños tipo pesadilla, resaltando la idea de que los sueños son realizaciones  disfrazadas de deseos reprimidos .

Según la  teoría la “censura” de Freud  de los sueños  produce una distorsión en su contenido, de esta manera lo que parece ser un conjunto de ideas completamente  incoherentes y sin sentido puede convertirse a través de la interpretación y la aplicación de un método “descifrador”, que conlleva un completo proceso de análisis y observación como un conjunto de ideas coherentes, que revelen un contenido interesante acerca de lo deseos que el paciente no manifiesta de manera consciente.

El profesor resaltaba la importancia de, la interpretación de los sueños dentro de la labor psicoanalítica, mencionando que para Freud todo sueño es interpretable, es decir puede encontrarse su sentido ya que todo sueño contiene un resto diurno, una fuente somática y un recuerdo infantil, siendo esta la manifestación de un deseo reprimido.

Es importante mencionar que la labor de interpretar no recae sobre todo el sueño en su conjunto sino sobre sus partes componentes, cada uno de los elementos incluso aquellos que no consideramos relevantes, son fundamentales en el momento de realizar dicha interpretación, en la mayoría de las ocasiones las personas suelenbasarse en una especie de libro de los sueños, donde cada uno de los elementos soñados significa otra cosa de manera rígida, sin tener en cuenta la peculiaridad y singularidad del individuo, primero debe descomponerse el relato en partes y casi al final surge la interpretación global en la cual se revela el sueño como una realización de deseos.

 De la clase puede concluirse entonces que Freud propone que el valor del análisis de los Sueños radica en la revelación de la actividad subconsciente de la mente.

“El sueño no es meramente actividad somática: es un acabado fenómeno psíquico de realización de deseos, y por tanto debe ser incluido en el conjunto de los actos comprensibles (no incomprensibles) de nuestra vida despierta, constituyendo el resultado de una actividad intelectual altamente complicada.

El deseo aparece disfrazado en el aspecto manifiesto del sueño, en lo efectivamente soñado, proceso denominado ‘deformación onírica’. Freud se pregunta por qué tiene que haber una deformación, ya que podría haber ocurrido que el sueño expresara el deseo en forma directa, sin deformación. Esta deformación es intencional y se debe a la censura que el sujeto ejerce contra la libre expresión de deseos, por encontrarlos censurables por algún motivo”.

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